Te quiero como si fueras
cinta de mi alpargata;
mira si te quiero tanto
que te quiero por las patas.

Y es tanto lo que te quiero
que te quisiera llevar
en el hueco de una muela
y en cuando, en cuando, apretar.

Morena tiene que ser
la tierra pa dar cebada
y la mujer, para el hombre,
blanca, gorda y colorada.

Niña, te daba más besos
en esa cara gitana
que huevos se necesita
pa romper una campana.

Niña, te daba más besos
en esa cara, y olé,
que granos de trigo tiene
la campiña de Jaén.

Qué bonita está una parra
con los racimos colgando;
más bonita está una niña
de catorce a quince años.

Siempre me ha gustado a mí
una rubia con salero
porque lleva la merienda
al revés de los porqueros.

Rubita, vente conmigo
a la viña de mi abuelo
y debajo de una cepa
te diré lo que te quiero.