El mantequero era un…, bueno, un personaje que a los niños los asustaban de pequeños pa que nos recogiéramos, porque los niños antes no eran como hoy, que lo lleva la madre de la mano, que lo trae del colegio, que lo mete en la casa y ya no sale hasta el otro día. Entonces no; entonces los niños estaban en la calle. Hasta que no se les iba el sol y se quedaba totalmente oscuro, los niños no volvían a la casa. Pero vamos, es que estábamos tirados por esas playas y por ahí. ¿Y qué pasaba? Pues que las madres rápidamente decían: “¡Que vienen los mantequeros! ¡Que viene el tío mantequero!”. Claro, decía “el tío mantero” y salíamos todos que volábamos. Entonces eso era un miedo que había.