Audio
Clasificación
Fecha de registro:
Referencia catalográfica:
0324n
Categoría:
Informantes
Recopiladores
Notas
Registro sonoro perteneciente al Archivo de la Tradición Oral de la Fundación Joaquín Díaz (sign.: ATO 00005A 12).
Título indicado en las anotaciones de campo: "Los ojaranquillos".
Muchos de los temas de esta entrevista fueron también transcritos en el Catálogo Folclórico de la provincia de Valladolid.
Transcripción
Pues…, dice que… | Antes, pues no había más que…, a lo mejor, en el pueblo, una escopeta solo, en todo el pueblo. Nievaba mucho por allí y, a la entrada de invierno, iban a hacer harina p’hasta to el año. Cada uno molía lo suyo; todos eran molineros. Lo llevaban con salvao y todo, y todos eran molineros. Y a un padre y un hijo, pues dice que salió tarde. Y llegó y estaba otro moliendo. Y le decía el chico:
—Me voy a por la cena, —dice— porque vamos a acabar | Vamos a estar to la noche moliendo porque este acaba tarde—.
Y…, y antes de venir el chico, tenían una alumbrada en el medio puesto del molino, y, alrededor estaban las piezas y la lumbrera en el suelo. Y dice que, por la puerta de arriba, el chico | No, el chico había ido a por la cena del padre y había visto asomar un ojo por un agujero que había. Y…, y claro, decía:
—Ahora que sé que viene el chico, pues voy a hacer como que no le he visto—.
Y, en cuanto llegó el chico por la puerta de abajo, cerraron. Y dice:
—Cállate, hijo, que están los oja-, los ojaranquillos ahí. A ver qué nos hacen—. Y dice: —Vamos a sentarnos como si tal cosa. Pero voy a meter esta barra —la que tenían pa levantar las piedras— en el fuego—.
Y la metió en el fuego. Con que ya dicen: —Mira, ahora está mirando otra vez. Mira—. Le veían brillar el ojo. Tenía dos cuernos y un ojo en el medio.
Y, salían de allí, de la montaña. Y…, y cogió, y…, y ya el… | Pues el ojaranquillo se debió ir a por un palo o algo y quería apalancar la puerta para entrar. Y al chico le dice: —Mira, estamos perdidos. Como…, como vengan… —dice— Pues yo me voy a poner detrás de la puerta. Cuando veas el ojo, me haces así y yo le meto el hierro por el ojo—.
Y así fue. El hierro caliente le…, se lo metió por el ojo y…, creo que unos chillidos, y el padre y el hijo se marcharon corriendo pa’l pueblo.
Y, a la entrada del pueblo, para | le pasaron dos cosas. Estaba nevando. En la entrada del pueblo le salieron unos cuantos lobos. Y…, el…, el padre se cayó, y el chico se echó a correr y como, hasta que buscó la escopeta, en to el pueblo que había una, pa espantar los lobos, pues ya le habían empezao por los pies pa comerlo, por las botas. Como iba en el burro haciendo así, pues le habían…, habían roto | comido los pies. Y… | Vamos, las botas solo. Y luego después, al otro día, pues fueron a…, a por la molienda, y estaba el… | El molino, le habían quemado los ojaranquillos. Le habían quemao, en venganza.
Dicen que había muchos. Sí, sí, si existían allí en la montaña.
Pues como un hombre, como un arangután, una cosa así, una cosa… Un bruto. Sí, si les he visto yo un día. Sí. Con un ojo solo en la frente. Cuando me le contaban a mí, estaba viendo yo el ojo por ahí.