Asturianita muerta por un galán desdeñado

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Notas

La informante neutraliza /l/ y /r/ en posición implosiva y final.

Aclaraciones léxicas:

desamarañó: por desenmarañó.

Bibliografía

IGRH: 5021

Otras versiones de "Asturianita muerta por un galán desdeñado"

Alonso Fernández y Cruz Casado (2003: n.º 45); Atero Burgos (2003: n.º 22); Benítez Sánchez (2000: p. 256); Checa Beltrán (2005: n.º 9); Fraile Gil (2013: n.º 33); Heredia Menchero (2017: n.º 1020); Hernández Fernández (2010: n.º 64-66); Mendoza Díaz-Maroto (1990: n.º 187); Moreno Moreno (2016: n.º 21); Pimentel García, (2020: n.º 86); Piñero Ramírez (1996: n.º 23); Piñero Ramírez (2004: n.º 17); Piñero Ramírez (2013: n.º 62); Tejerizo Robles (2007: n.º 424, 425); Trapero, León Felipe y Monroy Caballero (2016: n.º 165).

Contaminaciones y engarces

La novia de Pedro Carreño + Asturianita muerta por su galán desdeñado (CLO, 1424r).

Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.

Transcripción

En las montañas de Asturias,     una niña vi
con catorce o quince años     regando su jardín.
Pasó un caballero,     le pidió una flor,
la niña l´ha dicho     tres veces que no.
—Las flores de mi jardín     no son pa ningún caballero,
que las he criado yo     pa mí o para mi pelo.
—Niña guapita,     quédate con Dios;
por la cuestión de una rosa,     te tengo que matar—.
A otro día de mañana,     la niña se levantó
en busca del caballero,     a llevarle una flor.
—Tome, caballero,     la flor de mis manos
y déjame vivir     con mis tres hermanos.
—No quiero flor de tus manos     ni tampoco a ti—.
La cogió del pelo,     la desamarañó*,
le dio tres puñaladas     al lao del corazón.
La visten toda de blanco,     toda cubierta de flores
y, en cada mano, una rosa     con siete colores.
En el pecho lleva     un manojo de jazmines
con un letrero que dice:     “Criada en los jardines”.
Más abajo lleva     un ramo de azahar
con un letrero que dice:     “Matá por un criminal”.

Resumen de "Asturianita muerta por un galán desdeñado"

Una joven está regando las flores de su jardín. Se acerca un caballero para pedirle una, pero la muchacha se niega a entregársela, replicando que sus flores son solo para ella y que, aunque huérfana y joven, no va a permitir que ningún hombre abuse de ella. El galán la amenaza de muerte. Pasados unos días, la joven le ofrece la flor y le pide que la deje vivir tranquila con sus hermanos. Sin embargo, él asegura que ya no la quiere, la encierra en un cuarto y le asesta varias puñaladas. En otras versiones, el galán vuelve al jardín y rapta a la asturiana, de la que abusa antes de darle muerte. En el entierro, la muchacha va adornada con muchas flores. Lleva un ramo de azahar con un letrero que explica que ha sido asesinada por un criminal. El narrador pide la muerte del hombre que la mató.