El milagro del trigo

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Clasificación

Fecha de registro:
Referencia catalográfica: 1071r

Informantes

Recopiladores

Notas

La informante le da el título de La huida a Egipto.

Adolfa es de Calzada de Calatrava, pero reside en Ciudad Real, donde se recogió el romance.

Notas léxicas

pedazo: aquí con el significado de ‘porción de tierra de labor’ (vid. Pedro José del Real Francia y Juan Manuel Sánchez Miguel (2006):  Diccionario del habla de la provincia de Ciudad Real, Ciudad Real, Biblioteca de Autores Manchegos, p. 229).

(Nota léxica de Marta Torres Martínez)

Bibliografía

IGRH: 0512

Versión Publicada en Anaya Flores (1999: pp. 129-130; música p. 178; procedencia y peculiaridades p. 216) y Anaya Flores (2016:  301; música p. 402).

Otras versiones de "El milagro del trigo"

Alcalá Ortiz (2003: n.º 4035, 4036); Álvarez Cárcamo (2019: 25.16); Atero Burgos (2003: n.º 58); Benítez Sánchez (1999: pp. 223-224); Benítez Sánchez (2000: p. 265); Díaz (2007: B.5); Fraile Gil (2010: n.º 150); Fraile Gil (2013: n.º  48); Fraile Gil (2016: n.º 281-282); Gil Muñoz (2010: n.º 26); Higueras Martínez y Aguilar González (2001: pp. 154-155); Jaén Castaño (2018: n.º 537); Majada Neila (1984: n.º 67); Mendoza Díaz-Maroto (1990: n.º 138); Moreno Moreno (2016: n.º 75-81); Pimentel García (2020: n.º 216); Piñero Ramírez (1996: n.º 57); Piñero Ramírez (2004: n.º 45); Piñero Ramírez (2013: n.º 104); Piñero Ramírez y Atero Burgos (1986: p. 130); Piñero Ramírez y Atero Burgos (1987: n.º 81); Rico Beltrán (2009: n.º 71); Salazar (1999: n.º 137); Schubarth y Santamarina (1986: n.º 53); Tejerizo Robles (2007: n.º 483-485); Trapero (2000a: n.º 74, 75); Trapero (2000b: n.º 78); Trapero, León Felipe y Monroy Caballero (2016: n.º 93); Trujillo Pacheco (2017: n.º 50); Vázquez León (1993: n.º 18.1, 18.2).

Contaminaciones y engarces

Congoja de la Virgen en Belén + El milagro del trigo (Trapero, 2000a: n.º 73); Dudas de san José + El milagro del trigo (Foxo, 2011: p. 114-116); La Anunciación II + Dudas de san José + A Belén llegar + El milagro del trigo (Mendoza Díaz-Maroto, 1990: n.º 133); La Anunciación II + Dudas de san José + El milagro del trigo (Esteve Faubel, 1998: pp. 1183-1185; De Mur Bernad, 2015: n.º 78; Rico Beltrán, 2009: n.º 67; Schubarth y Santamarina, 1986: n.º 53a1-53a3); La Anunciación II + Dudas de san José + Nochebuena II + El milagro del trigo (Hernández Fernández, 2010: n.º 19); La Anunciación II + El milagro del trigo (Moreno Moreno, 2016: n.º 75.b); La Virgen y el ciego + El milagro del trigo (Trapero, 2000b: n.º 78.15).

Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.

Estudios

ATERO BURGOS, V. (1988). El romance de La huida a Egipto en cuatro versiones gaditanas: sus variantes con otras formas hispánicas. Guiniguada, 4, 51-71.

HERNÁNDEZ FERNÁNDEZ, A. (2006). El milagro del trigo: de los evangelios apócrifos al folklore y la literatura. Culturas Populares, 3. Recuperado de: El milagro del trigo: de los evangelios apócrifos al folklore y la literatura (uah.es)

MINGOTE, J. L. (1986). Iconografía y tradición oral. El milagro del campo de trigo en la huida a Egipto. Revista de Dialectología y Tradiciones Populares, 41, 109-133.

TRAPERO, M. (1990). Los romances religiosos en la tradición oral de Canarias. Madrid: Nieva.

VERGARA, F. y FRAILE, J. M. (1984). El milagro del trigo, un tema apócrifo. Revista de Folklore, 44 (4b), 45-52.

Transcripción

San José llegó a pedir     limosna a unos ganaderos
y le han dado cuatro panes     y la mitad de un cordero.
Y san José dice:     —¡Qué limosna es esta!
Vámonos, María,     a poner la mesa—.
Siguieron más adelante     y, a otro labrador que vieron,
le ha preguntado María:     —Labrador, ¿qué estás haciendo?—.
El labrador dice:     —Señora, sembrando
unas pocas piedras     para el otro año—.
Fue tanta la multitud     que el Señor le echó de piedras,
que se le ha puesto el pedazo*     como si fuera una sierra.
Este fue el castigo     que Dios le mandó
por ser mal hablado     (y) aquel labrador.
Siguieron más adelante     y otro labrador que vieron
le ha preguntado María:     —Labrador, ¿qué estás haciendo?—.
Y el labrador dice:     —Señora, sembrando
un poco de trigo     para el otro año.
—Pues ven mañana a segarlo     sin ninguna detención,
que es un milagro que te hace     la misma Madre de Dios—.
Y el labrador, con gran fe,     (y) a la noche fue a su casa,
diciéndole a su mujer     todo lo que le pasaba.
Buscaron peones     y a otro día fueron
a segar el trigo,     que ya estaba seco.
Estando segando el trigo,     pasaron dos a caballo;
por una mujer y un niño     y un viejo iban preguntando.
Y el labrador dice:     —Cierto que lo vi,
estando sembrando,     pasó por aquí—.
Uno al otro se miraban     y mil reniegos se echaron,
al ver que no se les logra     el intento que llevaron.
El intento era     de meterlos presos
para [¿recomarlos?]     a los universos.

Resumen de "El milagro del trigo"

La Virgen y san José huyen de Herodes, que quiere degollar a Jesús. En el camino sufren muchas penalidades (hambre, frío, etc.). En algunas versiones, san José pide limosna a unos ganaderos que le dan pan y cordero. A continuación, se encuentran con un labrador. La Virgen le pregunta qué está sembrando y este le contesta que piedras. Como castigo por su soberbia, todo el campo se convierte en rocas. Más adelante, se encuentran con otro labrador, al que María hace la misma pregunta. Este le contesta que está sembrando trigo para el siguiente año. La Virgen, como recompensa a su amabilidad, le anuncia que al día siguiente encontrará el campo lleno de trigo. A cambio, le pide que si viene alguien preguntando por ellos, le conteste que pasaron por allí cuando se estaba sembrando el trigo. El labrador vuelve a su casa y le cuenta a su mujer el lance. Al día siguiente, reúne a varios peones y marcha a segar el trigo. Mientras siega, se acercan a él unos jinetes para interrogarle acerca del paradero de la Virgen, san José y el niño. El labrador les responde que pasaron por allí cuando estaba sembrando el trigo. Los caballeros quedan apesadumbrados por no poder localizar a Jesús, a quien tenían la intención de matar o de presentarlo a Herodes.