Audio
Clasificación
Informantes
Recopiladores
Bibliografía
IGRH: 5129
Otras versiones de "Enrique y Lola"
Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.
Transcripción
Eran dos hermanos huérfanos criados en Barcelona,
el niño se llama Enrique, la niña se llama Lola.
Enrique ya se ha marchado, se ha marchado al extranjero;
trabajando en altas mares, se ha hecho de mucho dinero.
Se ha hecho de mucho dinero, disfruta de su mejora,
disfruta de lo que quiere, sin acordarse de Lola.
Mientras Lola está llorando día y noche por su hermano,
y a la Virgen del Pilar se ofrece para encontrarlo.
Le ha salido un caballero para casarse con Lola;
Lola acepta el casamiento por no verse ya tan sola.
Estando un día en la mesa, dice Lola a su marido:
—Vámonos para La Habana, tengo un hermano perdido.
Tengo un hermano perdido, y me ha dicho que allí están.
—Lola, tu gusto es el mío, para La Habana embarcar—.
Tomaron embarcación en la estación de Logroño;
pidieron habitación para vivir los dos solos.
Su marido cayó malo con las fiebres amarillas,
y al poco tiempo la Lola, se ve en el mundo solita.
Se ve en el mundo solita, y se ha visto obligada
a pedir una limosna por no morir desmayada.
Y ha pasado un caballero, le ha pedido una limosna,
y el caballero le ha dicho con sentimiento: —Perdona—.
El caballero que ha visto a la dama de llorar,
se ha echado mano a el bolsillo, siete pesetas le da.
—Y es usté una bella rosa, y es usté un bello clavel;
vaya mañana por casa, que yo la socorreré—.
Y a otro día fue la Lola en casa de este señor;
la ha cogido de la mano, la lleva a su habitación.
Le pide cosa imposible y ella le dice que no:
—Antes prefiero la muerte que manchar mi honra y mi honor.
¡Si estuviera aquí mi hermano, mi hermano de mis entrañas,
sacaría la defensa por la pobre de su hermana!
—¿Si es que tú te llamas Lola? —Lola me llamo, señor.
—Mátame, hermana del alma, que he sido tu inquisidor.