En un taller de bordados

Audio

Clasificación

Fecha de registro:
Referencia catalográfica: 1164r

Informantes

Recopiladores

Pilar Muñoz

Responsable del grupo investigador: Jerónimo Anaya Flores

Bibliografía

Otras versiones de "En un taller de bordados"

Atero Burgos (2003: n.º 185); Pimentel García (2020: n.º 595).

Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.

Transcripción

En un taller de bordados,     donde voy a trabajar,
cierto torero famoso     su capote dio a bordar.
Como me tienen por más diestra,     me dijo la maestra que lo bordara yo;
unos dibujos caprichosos      y adornos primorosos, mi mano allí trazó.
De aquel torero fue del que me enamoré;     pero en la humilde obrerita no se fijaba el torero,
que se fijaba en las hembras     por el imán del dinero.
Con otra se iba     y yo de pena moría.
¡Qué tarde aquella, Dios mío, que solo paso con él!      Ante mí lo vi pasar
cuando marchaba una tarde     a la plaza a torear.
Una mujer iba a su lado,     y el diestro, embelesado, le hablaba con pasión;
ella mimosa sonreía,     fingiendo que sentía por él gran ilusión.
Y yo a los toros fui     por ver el diestro allí.
Pero salen las cuadrillas     y, tras de dar el paseo,
a un palco lanza el capote     como el que brinda un trofeo.
La capa lucía     la otra mujer que él quería.
¡Qué tarde aquella, Dios mío,     nunca la podré olvidar!
Entre las astas del toro     se quedó al ir a matar.
Gritos de angustia resonaron     que el alma me dejaron transida de dolor.
Yo por mirar al que moría,      corrí a la enfermería en alas de mi amor.
Mas cuando allí llegué,     sin vida lo encontré.
Y una mujer solamente     junto al torero quedaba:
la que bordó su capote,     la que de verdad lo amaba.
Las otras se fueron     y ni rezar le supieron.

Resumen de "En un taller de bordados"

Una muchacha que borda en un taller se enamora de un torero famoso que acude allí para que le borden el capote. Sin embargo, él no se fija en ella porque es pobre. Adorado de muchas, acude a la plaza con una joven muy guapa. Nuestra protagonista también se encuentra allí. Ese mismo día lo coge el toro y muere en la enfermería de la plaza. La única que lo acompaña en el fatal trance es la bordadora.