Coplas tradicionales de Daimiel

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Clasificación

Fecha de registro:
Referencia catalográfica: 1184c

Informantes

Recopiladores

Notas

La informante lo canta de la siguiente manera: "Más quiero robar dinero, / más quiero robar dinero, / que la honra de una mujer; / el dinero se va y vuelve, / y la honra no puede volver, / la honra no puede volver / cuando una cuando una mujer la pierde. // El pañuelo de seda / de la hortelana / se ha caído en el pozo, / ¡quién fuera rana, / quién fuera rana!, / ¡quién fuera rana!, / el pañuelo de seda / de la hortelana. // Mi madre me da de palos, / mi madre me da de palos / porque quiero a un segador / y al son de los palos digo: / “¡Viva el puño de la hoz!”, / ¡viva el puño de la hoz!, / mi madre me da de palos. // Mi marido es un tonto, / quiere que vaya / con una criba al río / a cribar agua, / a cribar agua, niña, / a cribar agua, / mi marido es un tonto, / quiere que vaya. // Vela allí por donde viene, / vela allí por donde viene / mi agüela la vanidosa, / dice que no me quiere / porque no soy buena moza, / porque no soy buena moza, / vela allí por donde viene. // El clavel que me diste / lo tiré al pozo; / ya no quiero claveles / de ningún mozo, / de ningún mozo; / y ahora me pesa / el tiempo que lo tuve /en la cabeza. // Y que no es morena de nadie, / mi morena es mi morena, / que no es morena de nadie; / el que quiera una morena / vaya  a la sierra y la gane, / vaya a la sierra y la gane, /mi morena es mi morena. // Morenilla y graciosa, / rubia o castaña, / a mí me gusta toda / mujer de España, / mujer de España, niña, / mujer de España, / morenilla, graciosa, / rubia o castaña. // Toda llena de cantares / tengo yo una cantarilla, / toda llena de cantares; / cuando quiero sacar uno, / tiro de la cuerda y sale, / tiro de la cuerda y sale, / tengo yo una cantarilla. // El cantar que yo cojo / por las mañanas, / lo dejo más maduro / que unas manzanas, / que unas manzanas, niña, / que unas manzanas, / el cantar que yo cojo / por las mañanas. // Porque te miro a la cara, / ya pensarás que te quiero, / porque te miro a la cara; / es como el que va a la feria / y  mira y no compra nada, / y mira y no compra nada, / ya pensarás que te quiero. // Al pasar por la huerta / de mi tío Antón, / cogí un pepinillo, / me pegó un pescozón; / por más que corría, / por más que volaba, / ¡caracoles de mi tío, / qué palos me pegaba! // Puede salir a la calle / una morena con gracia, / puede salir a la calle; / una rubia desabría, / donde no la vea nadie, / donde no la vea nadie, / una morena con gracia. // A coger colorines / voy a tu patio, /y si no hay colorines, / contigo un rato, / contigo un rato, niña, / contigo un rato, / a coger colorines / voy a tu patio. // Con mi mujer y mi burra, / con mi mujer y mi burra, / con mi capa y mi chambergo, yo no le temo a la lluvia, / al relámpago ni al trueno, / yo no le temo a la lluvia, / al relámpago ni al tueno. // Mi madre es la que cuece / y yo la que me enharino / pa que diga mi amante / que yo he cocido, / que yo he cocido, niña, / que yo he cocido, / mi madre es la que cuece / y yo me enharino. // No me diga usted salada, / no me diga usted salada, / que yo no vendo la sal, / que la vende un salinero / que vive en la calle Real, / que vive en la calle Real, / no me diga usted salada. // Un pastor me ha querido / y un hortelano; / mejor quiero vender leche / que arrancar nabos, / que arrancar nabos, niña, / que arrancar nabos, / un pastor me he querido / y un hortelano. // Si siempre me estás pegando, /¿cómo quieres que te quiera, / si siempre me estás pegando?, / como si mi cuerpo fuera / hecho de piedra o de mármol, / hecho de piedra o de mármol, / ¿cómo quieres que te quiera? // En el rincón del arca / tengo escondido, / y como no te importa / no te lo digo, / no de lo digo, niña, / no te lo digo, / en el rincón del arca / tengo escondido. // Y por oírte de llorar / a mí me gusta pegarte, / por oírte de llorar; / parecen tus lagrimillas / caracolillos del mar, / caracolillos del mar, / a mí me gusta pegarte. // A mi agüela la quiero / como a la uvas, / colgadita en el techo / las asaduras, / las asaduras, niña, / las asaduras, / a mi agüela la quiero / como a las uvas. // Mi burra pide cebada, / mi burra cebada, / y mi mujer otro traje. / ¡Lo carillo que me cuesta / tener en casa animales!, / tener en casa animales, / mi burra pide cebada. // : El estribillo, el estribillo / por la escalera va / en un cestillo, / en un cestillo, en un cestillo,/ en un cestillo, / al estribillo, niña, / al estribillo. // O son ilusiones mías, / eres más guapa que nadie, / o son ilusiones mías; / tan bonita me pareces / que yo no te cambiaría, / que yo no te cambiaría, / aunque España entera me diesen. // Gañancillo lo quiero, / aunque me lleve / por los surcos alante / pisando nieve, / pisando nieve, niña, / pisando nieve, / gañancillo lo quiero, / aunque me lleve. // Alcarraza de tu patio, / niña, quisiera yo ser, / alcarraza de tu patio, / para besarte los labios / cuando fueras a beber, / cuando fueras a beber, / alcarraza de tu patio. // Arrodea, arrodea, / que vas por hilo; / yo también arrodeo / por ir contigo, / por ir contigo, niña, / por ir contigo, / arrodea arrodea, / que vas por hilo. // El domingo pa descansar, / ya viene sábado alegre, / domingo pa descansar, / el picarillo del lunes / para echar a trabajar."

Notas léxicas:

alcarraza: “Vasija de arcilla porosa y poco cocida, que tiene la propiedad de dejar rezumarse cierta porción de agua, cuya evaporación enfría la mayor cantidad del mismo líquido que queda dentro” (DRAE: 2014).

Transcripción

Más quiero robar dinero
que la honra de una mujer;
el dinero se va y vuelve,
y la honra no puede volver,
cuando una cuando una mujer la pierde.
 
El pañuelo de seda
de la hortelana
se ha caído en el pozo,
¡quién fuera rana!
 
Mi madre me da de palos
porque quiero a un segador
y al son de los palos digo:
“¡Viva el puño de la hoz!”.
 
Mi marido es un tonto,
quiere que vaya
con una criba al río
a cribar agua.
 
Vela allí por donde viene
mi agüela la vanidosa,
dice que no me quiere
porque no soy buena moza.
 
El clavel que me diste
lo tiré al pozo;
ya no quiero claveles
de ningún mozo;
y ahora me pesa
el tiempo que lo tuve
en la cabeza.
 
Mi morena es mi morena,
que no es morena de nadie;
el que quiera una morena
vaya a la sierra y la gane.
 
Morenilla y graciosa,
rubia o castaña,
a mí me gusta toda
mujer de España.
 
Tengo yo una cantarilla,
toda llena de cantares;
cuando quiero sacar uno,
tiro de la cuerda y sale.
 
El cantar que yo cojo
por las mañanas,
lo dejo más maduro
que unas manzanas.
 
Ya pensarás que te quiero,
porque te miro a la cara;
es como el que va a la feria
y mira y no compra nada.
 
Al pasar por la huerta
de mi tío Antón,
cogí un pepinillo,
me pegó un pescozón;
 
por más que corría,
por más que volaba,
¡caracoles de mi tío,
qué palos me pegaba!
 
Una morena con gracia
puede salir a la calle;
una rubia desabría,
donde no la vea nadie.
 
A coger colorines
voy a tu patio,
y si no hay colorines,
contigo un rato.
 
Con mi mujer y mi burra,
con mi capa y mi chambergo,
yo no le temo a la lluvia,
al relámpago ni al trueno.
 
Mi madre es la que cuece
y yo la que me enharino
pa que diga mi amante
que yo he cocido.
 
No me diga usted salada,
que yo no vendo la sal,
que la vende un salinero
que vive en la calle Real.
 
Un pastor me ha querido
y un hortelano;
mejor quiero vender leche
que arrancar nabos.
 
¿Cómo quieres que te quiera,
si siempre me estás pegando,
como si mi cuerpo fuera
hecho de piedra o de mármol?
 
En el rincón del arca
tengo escondido,
y como no te importa
no te lo digo.
 
A mí me gusta pegarte
por oírte de llorar;
parecen tus lagrimillas
caracolillos del mar.
 
A mi abuela la quiero
como a las uvas,
colgadita en el techo
las asaduras.
 
Mi burra pide cebada,
y mi mujer otro traje.
¡Lo carillo que me cuesta
tener en casa animales!
 
El estribillo, el estribillo
por la escalera va
en un cestillo.
 
Eres más guapa que nadie,
o son ilusiones mías;
tan bonita me pareces
que yo no te cambiaría,
aunque España entera me diesen.
 
Gañancillo lo quiero,
aunque me lleve
por los surcos alante
pisando nieve.
 
Alcarraza de tu patio,
niña, quisiera yo ser,
para besarte los labios
cuando fueras a beber.
 
Arrodea, arrodea,
que vas por hilo;
yo también arrodeo
por ir contigo.
 
Ya viene sábado alegre,
domingo pa descansar,
el picarillo del lunes
para echar a trabajar.