Audio
Clasificación
Informantes
Recopiladores
Notas
Archivo sonoro perteneciente al Archivo de la Tradición Oral de la Fundación Joaquín Díaz (sign.: ATO 00060 07).
En las anotaciones de campo, se identifica con el título "El gallo quiere limpiarse el pico".
Este registro ha sido editado en el marco del proyecto de I+D del Ministerio de Ciencia e Innovación “El corpus de la narrativa oral en la cuenca occidental del Mediterráneo: estudio comparativo y edición digital (CONOCOM)” (referencia: PID2021-122438NB-I00), financiado por la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).
Transcripción
Este era un gallo, un gallo muy presumido, muy presumido, y, y le habían mandao una carta su tío Perico, que tenía que | se iba a casar y que le invitaba a la boda. Pues se puso todo chulo, todo guapo, se lavó bien las plumitas y ya iba cantando por el camino tan contento, pero de repente pos vio un mudadal, y claro, le tiró la idea de picar en él. Y decía: “¿Qué haré yo? Si pico, me mancho el pico y, y, y tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito. Pero picó. Picó, se manchó el piquito y entonces se entristeció todo. Se lo limpió con unas yerbas y nada, no se le quitaba. Iba todo triste, todo triste: “Ay, ay, que tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito”. Y se encontró una malva. Y dice:
—Malva, ¿No me podrías limpiar el pico? Que tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito—.
Y dice: —No quiero—.
Entonces, dice: —Bueno, pues me voy para allá—.
Ya se va andando todo triste, todo triste, se encuentra una oveja. Dice:
—Oveja, come a malva, que la malva no ha querido limpiarme el pico y tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito—.
Dice: —No quiero—.
Dice: —Bueno, pos me voy para allá—.
Iba andando, andando, andando y se encontró un lobo:
—Lobo, come a oveja, que oveja no ha querido comer a la malva, la malva no ha querido limpiarme el pico, tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito—.
Dice: —No quiero—.
Entonces va andando, andando, andando y se encuentra un palo:
—Palo, pega a lobo, que el lobo no ha querido comer a oveja, oveja no ha querido comer a la malva y la malva no ha querido limpiarme el pico y tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito—.
Dice: —No quiero.
—Bueno, pues me voy para allá—.
Y todo triste el pobre gallito sigue andando y se encuentra una lumbre. Dice:
—Lumbre, quema al palo, que el palo no ha querido pegar al lobo, el lobo no ha querido que… | comer a oveja, la oveja no ha querido comer a la malva y malva no ha querido limpiarme el piquito, que tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito—.
Dice: —No quiero—.
Entonces va más allá, más allá, más allá y se encuentra un arroyo:
—Agua, apaga la lumbre, que la lumbre no ha querido quemar a palo, que palo no ha querido pegar a lobo, que lobo no ha querido comer a oveja, que oveja no ha querido comer a la malva y la malva no ha querido limpiarme el pico, porque tengo que ir a la boda de mi tío Perico y tengo que ir muy limpito—.
Y dice: —No quiero—.
Dice: —Bueno, pues entonces me limpiaré yo solo—.
Se agachó el pobre a limpiarse el pico en el agua y ¡pom!, se cayó. Y va, la corriente le llevaba, vinieron las doncellitas de su tío Perico a por agua pa’ hacer la comida. Le vieron, le cogieron, le pelaron, le guisaron con arroz y en las bodas de su tío Perico, el pobre gallito allí terminó.