El reparto del queso [ATU 51*** + ATU 926D]

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Referencia catalográfica: 1495n

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Notas

Esta versión, transmitida en cabileño, ha sido traducida por Óscar Abenójar.

Este registro ha sido editado en el marco del proyecto de I+D del Ministerio de Ciencia e Innovación “El corpus de la narrativa oral en la cuenca occidental del Mediterráneo: estudio comparativo y edición digital (CONOCOM)” (referencia: PID2021-122438NB-I00), financiado por la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).

Transcripción

Traducción

Había una vez dos ratones que se habían encontrado un pedazo de queso, y no había manera de que se pusieran de acuerdo para repartirlo. Uno decía que tenían que cortarlo de tal manera, y el otro decía que tenían que hacerlo de tal otra. Y no llegaban a ningún acuerdo. Entonces uno de ellos le propuso al otro: “Pues vamos a ver al tío gato, y que él se encargue de partirlo. Tú te llevarás tu parte, y yo me llevaré la mía”. El otro aceptó, y se fueron a ver al gato. Lo encontraron y lo saludaron:

—¡Que la paz sea contigo, gato!

—¡Sed bienvenidos!—.

Los ratones le pidieron que, por favor, les cortara el queso en dos trozos. Y el gato aceptó encantado. Cogió un cuchillo y cortó el queso. Pero un pedazo le salió demasiado grande y el otro muy pequeño; de modo que, al colocar las dos partes en los platillos de la balanza, el trozo grande bajó y el otro subió. Les dijo: “Esperad…”. Luego cogió el pedazo de mayor tamaño, le quitó un trozo y se lo comió.

Pero había quitado demasiado queso de la parte grande. Así que, cuando los dejó sobre la balanza, uno de los brazos volvió a bajar: “Esperad un momento”, les dijo, “que ahora voy a quitar un pedazo de la otra parte, para que queden iguales”. Y volvió a quitar un pedazo de la otra parte, y se lo comió. Pero la balanza volvió a bajar. Entonces tuvo que quitar de nuevo un pedazo de queso. Y volvió a comérselo. Y siguió así, así… Hasta que al final se terminó todo el queso. No dejó ni una migaja. ¡Se lo comió entero!

Después los dos ratones se marcharon, y por el camino empezaron a pelearse entre ellos: “Ya te dije que nos lo repartiéramos entre tú y yo”, dijo uno de ellos, “pero tú insististe en que fuéramos a ver al gato. Y ahora ¡mira lo que ha pasado!”.

Resumen de ATU 51***

The Fox as Umpire to Divide Cheese. Two animals fight over some prey (cheese, mat) and ask a fox (monkey, cat) to judge the case. He eats it himself (cat eats the two animals [K815.7]) [K452]. Cf. Type 9260.

In some variants the fox takes bites from the pieces of food to make both parts the same. In the end he eats them both. (Uther, 2004: I, 47).

[El zorro como árbitro para dividir el queso. Dos animales discuten por algo de presa (queso, estera) y le piden a un zorro (mono, gato) que juzgue el caso. Él mismo se lo come (el gato se come a los dos animales [K815.7]) [K452]. Cf. Tipo 9260.

En algunas variantes, el zorro le da mordiscos a los trozos de comida para hacer ambas partes iguales. Al final, se las come las dos. (Traducción de Laura Moreno Gámez)]

Resumen de ATU 926D

The Judge Appropriates the Object of Dispute. (Including the previous Type 518*). This miscellaneous type comprises various tales dealing with a dispute between two parties that is decided in favour to a third person who is to judge their case. The judge either takes the contested object as evidence or destroys it [J1171, K451, K451.1, K452]. Cf. Type 926C.

For example, two cats fight over a rice cake, and the monkey who is to decide the case eats it. A lawyer who is to decide the case of two men charges them such high fees that he is able to buy the disputed object (calf) with his earnings. The song of a bird was not meant for the plaintif but for the judge. Cf. Types 51***,400, and 518. (Uther, 2004: I, 562).

[El juez se apropia del objeto de controversia. (Incluye el anterior Tipo 518*). Este tipo misceláneo comprende varios cuentos que tratan sobre una disputa entre dos partes que se resuelve a favor de una tercera persona, que es el que juzga el caso. El juez toma como prueba el objeto impugnado o lo destruye [J1171, K451, K451.1, K452]. Cf. Tipo 926C.

Por ejemplo, dos gatos se pelean por un pastel de arroz, y el mono, que ha de decidir el caso, se lo come. Un abogado que va a decidir el caso de dos hombres, les cobra unas tarifas tan altas que puede comprar el objeto en disputa (un ternero) con sus ganancias. El canto de un pájaro no era para el demandante sino para el juez. Cf. Tipos 51***,400 y 518. (Traducción de Laura Moreno Gámez)]