Lunes y martes, miércoles, tres

Audio

Clasificación

Fecha de registro:
Referencia catalográfica: 1664n

Informantes

Recopiladores

Notas

Este registro ha sido editado en el marco del proyecto de I+D del Ministerio de Ciencia e Innovación “El corpus de la narrativa oral en la cuenca occidental del Mediterráneo: estudio comparativo y edición digital (CONOCOM)” (referencia: PID2021-122438NB-I00), financiado por la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER).

Transcripción

Traducción

Pues resulta que en Albelda, hace muchos años, vivían muchas brujas, y cada noche se reunían en la calle de la Ereta. Allí, en la calle de la Ereta, comenzaban sus cantos y bailes, y comenzaban cada noche: “Lunes y martes, miércoles, tres”.

Y así mucho rato: “Lunes y martes y miércoles, tres”.

Y los vecinos estaban muy hartos de todo eso. Y cada día, pues: “Lunes y martes, miércoles, tres; jueves y viernes, sábado, seis. Lunes y martes, miércoles, tres; jueves y viernes, sábado, seis”.

Allí, en aquella placeta de la aireta, cada noche, cada noche, había estos rituales a la vera de la hoguera y los vecinos estaban muy hartos. Y al final, un día que cantaban: “Lunes y martes, miércoles, seis; jueves y viernes, sábado, seis”.

Fue un vecino y dijo: ”¡Y domingo, siete!”.

En ese momento las brujas desaparecieron todas y… ya, bueno, no se volvió a saber nada más [de ellas] y se fueron.

 

 

Transcripción

Pues resulta que a Albelda, fa molts anys hi vivien moltes bruixes i cada nit se reuniven al Carrer de la Ereta. Allí al Carrer de la Ereta començaven los seus cants i balls i començaven cada nit: “Lunes y martes, miércoles, tres”.

I bueno, i així molt rato: “Lunes y martes, miércoles, tres”.

I los veïns n'estaven molt farts de tot això. I cada dia pues: Lunes y martes, miércoles, tres. Jueves y viernes, sábado, seis. Lunes y martes, miércoles, tres. Jueves y viernes, sábado, seis”.

Allí a n'aquella placeta de la Ereta, cada nit, cada nit, ny'era estos rituals a la vora de la foguera,  i los veïns n'estaven molt farts i al final, un dia que cantaven: “Lunes y martes, miércoles, seis. Jueves y viernes, sábado, seis”.

Hi va eixir un veí i va dir: “Y domingo, siete”.

En aquell moment, les bruixes van desaparèixer totes i… ja bueno, no se va sentir res més ixa nit.