La Virgen salva a un prisionero de guerra + La morita

Audio

Clasificación

Fecha de registro:
Referencia catalográfica: 2089r

Informantes

Recopiladores

Bibliografía

IGRH: 0000 + 0000

Otras versiones de "La Virgen salva a un prisionero de guerra"

Alcalá Ortiz (2003: pp. 1053-1055)

Otras versiones de "La morita"

Atero Burgos (2003: n.º 140); Barrios Manzano y Jiménez Rodrigo (2002-2003: n.º 126); Escribano Pueo, Fuentes Vázquez y Romero López (1995: n.º 23); Pimentel García (2020: n.º 506).

Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.

Transcripción

Era una noche muy escura,     solo alumbraba un lucero,

un soldado en su amargura     se lo llevan prisionero,

y no sabiendo     dónde marchaba

pero sufriendo     triste lloraba:

“¡Ay, madre mía,     —solo pensó—,    

qué mala suerte     he tenido yo!”

De ver lo que rodeaba,     de ver a su compañía

y sufriendo su dolor     entraba en su compañía.

Cansado ya de penar     con ganado en la montaña,

día de fiesta real     que se celebra en España.

—¡Ay, patria mía     de mis amores,    

hermosa Virgen     de los Dolores!,

préstame auxilio     para fugar,    

que yo a mis padres     quiero abrazar—.

Estando un día trabajando     y en los combates de Liza,

revuelta en los escombros     se encuentra a una morita.

La morita era pequeña,     contaba unos cuatro años,

su casa fue destruía     por bombas de un aeroplano

y la morita:     —¡Ay, español,    

con alegría,     yo palos no!—.

Se aconsejaron,     fuerte gritaba    

y la morita     en el suelo daba.

Le preguntaban los moros:     “¿a España te quieres ir?”,

tenía que decir que no     porque lo hacían sufrir.

—Te vamos a libertar     con el nombre de Mahoma,

no tengas pena, Jiménez,     aquí está tu salvadora.

Resumen de "La Virgen salva a un prisionero de guerra"

Un soldado español es cautivado por el bando enemigo durante la Guerra de Marruecos. Lo utilizan como animal de carga cuyo principal cometido es tirar de una noria. Le asignan la labor de azotarlo a una mujer árabe, pero esta siente compasión y finge los golpes. El día de la fiesta real, el prisionero sale a cuidar del ganado. Extraña su patria y le pide a la Virgen que lo ampare. Sueña durante tres noches con una voz que le aconseja que escape por la sierra. Finalmente, se decide a llevar a cabo la empresa. Tras varios días en los que sufre verdaderas calamidades, consigue llegar al campamento de Tetuán. Está tan débil que sufre un desvanecimiento. Los soldados españoles lo recogen y lo curan.

Resumen de "La morita"

Unos soldados españoles se encuentran a una chiquilla mora debajo de los escombros de su destruida casa. Estos deciden llevarla consigo al campamento, donde la bautizan y la visten a la usanza española.