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Bibliografía
IGRH: 0175
Otras versiones de "Mariana Pineda"
Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.
AYESTARÁN, L. (1959). Romance de Mariana Pineda en el folklore uruguayo. Marcha, 966 (2), 5B-6B. Recuperado de la Biblioteca Digital Centro Nacional de Documentación Musical Lauro Ayestarán.
GÁLVEZ RUIZ, M.ª A. y SÁNCHEZ GÓMEZ, P. (Coords.) (2008). La Granada de Mariana Pineda: lugares, historia y literatura. Universidad de Granada.
GARRIDO CURIEL, F. (2016). Aspectos de la figura histórica de Mariana de Pineda en la cultura artística, literaria y teatral española [Tesis doctoral]. Universidad de Granada.
HERNÁNDEZ GONZÁLEZ, C. (2009). Mariana Pineda en la palabra literaria. En M.ª P. Celma Valero y M. Rodríguez Pequeño (Coords.), Vivir al margen: mujer, poder e institución literaria (pp. 281-289). Universidad de Valladolid.
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Transcripción
Marianita salió de Granada, al encuentro salió un militar
y le dice: —Doña Marianita, hay peligro, vuélvase usted atrás.
—El peligro es mu grande y no puedo de bordar de este triste color.
El cuidado será cuidadoso, cerraremos ventana y balcón—.
A eso llega la moza traidora, a su ama un beso falso da,
Marinita cogió las pistolas y a la moza un tiro le da.
Entre cuatro soldados traidores, Marianita pa la cárcel va.
—Marianita, como no declares, a la cárcel te vamos a llevar—.
La metieron en un cuarto sola con los jueces (y) en declaración.
—Marianita, dime quién lo ha dicho. –—Eso sí que no lo digo yo.
—Marianita, declara, declara. —Señor juez, no puedo declarar;
declarando, morirían muchos y así muero yo sola na más—.
Le pusieron sus hijos delante por si algo podían conseguir,
y contesta tristosa y llorosa: —No declaro, que quiero morir.
¡Ay, quitarme mis hijos delante! Me se arranca hasta el corazón,
porque muere la que tanto tiempo con sus pechos los alimentó—.
¡Ay, qué día más triste en Granada!, que a las piedras la hicieron llorar,
que mataron a doña Marianita solamente por no declarar.