Madre, Francisco no viene

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Fecha de registro:
Referencia catalográfica: 2388r

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Bibliografía

IGRH: 0193

Otras versiones de "Madre, Francisco no viene"

Alonso Fernández y Cruz Casado (2003: n.º 14); Álvarez Cárcamo (2019: 9.7); Atero Burgos (2003: n.º 112); Checa Beltrán (2005: n.º 25); Díaz (2007: F.28); Fraile Gil (2016: n.º 19); Majada Neila (1984: n.º 76); Manzano Alonso (2003: pp. 381-382); Marazuela Albornos (1981: n.º 166); Moreno Moreno (2016: n.º 115); Pimentel García (2020: n.º 438); Piñero Ramírez y Atero Burgos (1987: n.º 38); Salazar (1999: n.º 44); Schubarth y Santamarina (1987: n.º 56); Suárez López (2009: n.º 243); Valenciano López de Andújar (1994: n.º 112).

Contaminaciones y engarces

Madre, Francisco no viene + Muerte del príncipe don Juan (Valenciano López de Andújar, 1994: n.º 112.b); Novio asesinado + Madre, Francisco no viene (Benítez Sánchez, 1999: p. 272; Benítez Sánchez, 2000: p. 242).

Ver referencias completas en Fuentes citadas abreviadamente.

Transcripción

En la provincia Jaén,     hay una niña jerezana

que venía dos veces el novio,     dos veces en la semana.

Esta semana no vino,     ni tampoco la pasada.

—Madre, Francisco no viene,     madre, Francisco se tarda.

—Niña, no me seas tonta,     ni tampoco exagerada,

que estamos en simentera     y están las yuntas apuradas—.

Ella se ha subido arriba     y se asoma a la ventana,

y ve venir un caballero     en una jaca jerezana.

—¿Qué noticias me traerá?     —Niña, para ti son malas,

que si lo quieres ver vivo,     monta en mi jaca jerezana

y si lo quieres ver muerto,     mañana por la mañana.

—¿Qué vestido me pondré?     (Y) el de la cinta morada,

que no quiero ir de luto     pero tampoco de gala—.

Al entrar por la ciudad,     las campanas que doblaban,

era el pobre de Manuel     que a Dios le entregó su alma.

Resumen de "Madre, Francisco no viene"

Una joven está preocupada porque hace varios días que su novio no va a verla. Su madre trata de tranquilizarla asegurándole que estará ocupado con el trabajo, ya que es tiempo de sementera. La muchacha se asoma a una ventana y ve venir a un hombre montado en una jaca, que le comunica que su novio se encuentra gravemente enfermo. Desesperada, le pide a su madre que le saque la ropa de luto y el caballo en el que su novio solía montar. La joven cabalga deprisa, pero cuando llega al pueblo, las campanas repican por la muerte del joven o ella se cruza con el entierro. En algunas versiones, la muchacha vuelve a su casa, se encierra en su aposento y muere. Entierran a los dos novios juntos.