Audio
Clasificación
Informantes
Recopiladores
Transcripción
Una codorniz sencilla
daba quejas al aire,
ya estaba arrepentida:
¡Ay de mí, miserable,
infeliz avecilla,
que antes cantaba libre,
y ahora lloro cautiva!
—Perdí mi nido amado,
perdí mis delicias,
y al fin perdí todo,
pues perdí mi vida.