Cantares te cantaré,

pero romances no puedo,

que están las ramas muy altas

y me cuestan el dinero.

 

[Com. 1: También lo cantaban los mozos a la puerta.]

 

No me tires chinitas

al lavadero,

que, aunque estoy de rodillas,

yo ni las veo.

 

Tírame nueces,

tírame cuatro, niña,

en dos veces. 

 

[Com. 2: Y contestan ellos:]

 

—Toma, niña, ese pañuelo

y guárdalo en el bolsillo,

a ver si con el pañuelo,

me vas cogiendo cariño.

 

Cuando paso por tu puerta,

cojo pan y voy comiendo,

pa que no digan tus padres

que de verte me mantengo.

 

Las banderillas del puente

se menean cuando paso,

de ti solita me acuerdo,

de las demás no hago caso.

 

Viva la media naranja,

viva la naranja entera,

viva la Guardia Civil,

que vive en la carretera.