Audio
Clasificación
Informantes
Recopiladores
Notas
Se repite el final de los versos 6, 11, 16, 17, 19, 24 y 26.
Registro sonoro perteneciente al Archivo de la Tradición Oral de la Fundación Joaquín Díaz (sign.: ATO 00031 15).
Transcripción
Canta, bilbainica, canta
tus lindas canciones,
porque el hombre goza
cuando le hablan de ilusiones.
Bajo las parras de moscatel,
menuda borrachera antes de ayer,
(y) mi morena, que así me vio,
entre mis brazos desmayada se quedó.
Entre suspiros me llamaba:
—Ingrato, borracho perdido,
que estás abusando de mi querer.
Y yo la dije:
—No hay mejor placer
que emborracharse
con besos de una mujer.
Quiéreme, niña gentil,
quiéreme, por compasión,
que si tú a mí no me quieres,
de pena me muero yo.
No hay mejor placer
que emborracharse
con besos de una mujer.
No hay mejor placer
que emborracharse sin cesar,
una y otra vez,
para las penas olvidar.
Que no me vengas
con naranjas de la China,
¡ay, qué marrana!,
¡ay, qué cochina!
Que no me vengas
con naranjas de La Habana,
¡ay, qué cochina!,
¡ay, qué marrana es mi mujer!